Los altos costos han limitado el derecho de muchas familias meridanas a tener un espacio seguro, aun cuando los salarios han aumentado
Mérida, Yuc. El incremento de los insumos de construcción por la inflación y los aranceles, sumado a los elevados precios de renta y compra de casas, ha reducido significativamente las posibilidades de las familias meridanas de acceder a una vivienda digna.
Según el Índice de Precios de la Sociedad Hipotecaria Federal (SHF), Yucatán ocupa el cuarto lugar nacional en costo promedio de vivienda, con un valor de 2.3 millones de pesos, lo que representa un aumento anual del 10.1 %.
Durante la temporada de huracanes, la falta de vivienda adecuada se vuelve más crítica para muchas familias. Así lo expresó el señor Efraín Caamal, vecino de la colonia Plan de Ayala Sur III, quien envió una carta al gobernador Joaquín Díaz Mena solicitando apoyo habitacional: “ya que se vienen temporadas de lluvia y aquí en la colonia Plan de Ayala Sur, muchas familias padecemos de una vivienda digna donde pasar esos fenómenos naturales”.
Aunque Yucatán fue la sexta entidad con mayor crecimiento salarial del país en el cuarto trimestre de 2024, con un alza del 9.6 % respecto al mismo periodo del año anterior y un salario promedio mensual de siete mil 390 pesos, de acuerdo con el Inegi, este ingreso no es suficiente para quienes viven al día.
Mario Arturo Cauich Arceo, por ejemplo, afirma que su salario no le permite reforzar su vivienda: “necesitamos el apoyo de vivienda, porque ahora que vienen las lluvias, nuestros techos se vienen abajo, por eso necesitamos del apoyo”, señaló.
Por su parte, el gobierno federal lanzó el programa “Vivienda del Bienestar”, aunque hasta ahora no ha beneficiado a residentes de Mérida. La piedra simbólica del proyecto fue colocada en el municipio de Tekax, y los requisitos contemplan únicamente a personas con empleo formal.
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