El pasado domingo 26 de noviembre de 2023 se llevó a cabo el II Encuentro Estatal de Danzas Tradicionales en el parque Cuauhtémoc de la capital mexiquense, Toluca. Es la segunda edición de este encuentro. La primera se hizo el año pasado en la explanada de la presidencia municipal de Atlacomulco. Se hizo la convocatoria para dos categorías: Libre popular, Obrero, Campesino y la Estudiantil.
El evento inició con un desfile de las comparsas por las calles de Toluca, desde el famoso Cosmovitral, pasando por los arcos de Toluca, hasta llegar a la Alameda Central Parque Cuauhtémoc. El conjunto de grupos de danzas tradicionales, en los cuales desfilaron niños, jóvenes, adultos y adultos mayores, acompañados por música en vivo, generaron, definitivamente, ante los ojos de los espectadores, un impacto positivo y, al propio tiempo, asombro por ser la primera vez en mucho tiempo que no se veía algo similar en las calles de Toluca. La novedad, el colorido y el esplendor, pusieron en alto el nombre de nuestra querida organización: el Movimiento Antorchista Nacional, pues muestran el verdadero rostro de Antorcha y no el que le han dibujado sus enemigos políticos.
Pasaron a desfilar grupos tradicionales de danzantes: “El Carnaval de Chimalhuacán es uno de los más emblemáticos de la entidad y uno de los de más larga duración en el mundo, al festejarse durante casi tres meses, y este año espera recibir a más de medio millón de visitantes… Esta festividad se arraigó en el país con el arribo de Maximiliano de Habsburgo y su esposa, la emperatriz Carlota, en 1864, y comenzó a llevarse a cabo como un acto de protesta por los excesos de la clase alta. Posteriormente, fue adoptada como tradición popular en el municipio de Chimalhuacán y a lo largo de los años se mezcló con una danza original conocida como los Huehuenches. Los danzantes visten trajes de charros tejidos con hilos de oro, plata y pedrería fina, que se importan de Francia…, cuyo costo puede variar desde los 60 mil hasta los 120 mil pesos, según el bordado, explicó Jesús Buendía Hernández, quien heredó la confección de trajes de carnaval desde 1972” (Quadratín, 26 de febrero de 2018).
Otra de las comparsas tradicionales que se hicieron presentes, fue la de los carnavaleros de Santa Isabel Ixtapan. Para que el lector tenga noción de la zona de la que hablamos, resulta que, en el Museo Nacional de Antropología e Historia, los restos del mamut que ahí se exhiben, fueron encontrados justamente en Santa Isabel Ixtapan, municipio de Atenco, Estado de México. “En un acta de Cabildo del H. Ayuntamiento de Atenco del mes de enero de 1880 que se encuentra en el Archivo Histórico de Texcoco, se dice que: “Los trabajos para recoger las ramas de los árboles que arrastró el agua y que están depositados en el lago se deben realizar después de que termine el carnaval”, por este dato podemos decir que el carnaval tiene por lo menos 136 años.” (H. Ayuntamiento de Atenco, 2016 a 2018).
Una más de las danzas tradicionales que acudió a la convocatoria fue la de los llamados “Becerreros” o “de los becerros” del municipio mexiquense de Zumpahuacán; se sentía el aire de fiesta y el Arcángel Miguel, quien venció al diablo o al dragón, era el patrón de esta danza. También acudieron los Xhitas de Jilotepec: “De enero a febrero las calles se irrumpen con un gran estruendo, música a todo lo que da y unas criaturas extrañas con la cara cubierta danzando en las calles de Jilotepec. A lo lejos parecen demonios, de cerca no es tan claro lo que son. Lo que le podría parecer una pesadilla a los foráneos, para los locales representa una de nuestras tradiciones más queridas.
Personas de las que sólo vemos sus ojos hacen sonar sus chicotes, trompetas y acocotes. Los vecinos salen de sus casas para ver el espectáculo, que aunque se repite cada año, siempre parece diferente. Los greñeros se agitan sobre las cabezas danzantes, y uno que otro le extiende su mano al público para ponerlo a bailar, haciéndolo aún más parte de una tradición que ya es de todos. Su ritmo resuena todavía más fuerte con el sonido de sus risas. Este es el carnaval Xhita... Sobre sus cabezas llevan el icónico greñero, fabricado con entre 50 a 100 colas de res y sus prominentes cuernos. Tiene un peso aproximado de 10 kg, y para construirlo cada participante recolecta las colas, las tiñe y, quien tiene el conocimiento adecuado, lo construye para sí mismo o para los demás. Este greñero representa a la bestia de carga que jala el arado en las milpas y su uso se corona con el performance de los participantes que imitan los movimientos del toro. La representación del animal se acompaña con el sonido del acocote o trompetilla, que simula el bufido del animal. En la otra mano, el Xhita lleva el chicote, un lazo trenzado que al azotarlo al suelo emite un chasquido que se asemeja al trueno. Los Xhitas bailan y resuenan la tierra con la intención de atraer la fertilidad de sus adentros y hacerla resonar hasta el cielo, atrayendo la lluvia. En sus pechos llevan zarapes con la imagen de la virgen de Guadalupe o del santo patrono que respecta a sus comunidades. Y finalmente, en sus rostros habita la contradicción que viene con el sincretismo: caras cubiertas con trapos largos que ocultan sus identidades, reclamando su derecho a pecar por cuarenta días, y su renuncia a la comunión de su propia iglesia”. (Texto de Jovana Hernández – @plumas.de.ganso).
Más de 20 grupos participaron en el II Encuentro Estatal de Danzas Tradicionales del Movimiento Antorchista del Estado de México. Con ello ponemos de relieve como organización: primero, que nos decantamos a favor de las tradiciones de nuestro pueblo; segundo, que damos la batalla en contra de la enajenación y en contra de la imposición cultural extranjera, determinada por las redes sociales y el interés comercial, para tener al pueblo ajeno a sus problemas y lejos de su identidad; tercero, que promovemos la unidad nacional de los pueblos, pues una vez que reconocemos nuestras tradiciones, nos convencemos de que debemos mantenernos unidos y, finalmente, que somos una organización que, sin el poder del país, somos capaces de lograr reunir a tan importantes grupos de participantes, qué sería del país si Antorcha, de la mano del pueblo, gobernara esta patria, entonces, la política cultural del país, cambiaría para bien de toda la nación, también cambiaría en el terreno social, económico, deportivo, político, democrático, educativo, de salud, etc. Felicidades a los participantes y, por supuesto, también a los ganadores. Felicito a los activistas organizadores y a la comisión estatal cultural por la realización de este importante evento e invito a los mexiquenses a que se inscriban para el tercer concurso que se llevará a cabo en el año 2024.
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