El revanchismo político que mantiene con los coahuilenses el Gobierno federal, llamado de la Cuarta Transformación y encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, se puso de manifiesto nuevamente al despreciar la historia de México al no acudir ni enviar representante federal a la celebración del 111 aniversario de la firma del Plan de Guadalupe.
Como habrán de recordar, anteriormente acudía a ese evento el mismo presidente de la república, pero ahora ni siquiera se dio por enterado, aunque no por ello se ha suspendido esa tradición que llena de orgullo a los coahuilenses.
Prueba de ello es que en dicho festejo, las y los diputados del Congreso del estado de Coahuila refrendaron su compromiso de seguir trabajando incansablemente para construir y fortalecer el marco jurídico de Coahuila, donde continúe siendo prioridad el respeto y garantía de los derechos ciudadanos, así como la justicia accesible para todas y todos.
Durante la ceremonia que se llevó a cabo en la ex- Hacienda de Guadalupe en el municipio de Ramos Arizpe, misma que estuvo encabezada por el gobernador del estado, Manolo Jiménez Salinas, y autoridades de los tres órdenes de Gobierno, el mensaje oficial estuvo a cargo de la presidenta de la Junta de Gobierno del Congreso del estado, Luz Elena Guadalupe Morales Núñez, quien señaló que la firma del Plan de Guadalupe en 1913 en Coahuila representa un momento histórico de unidad y resistencia frente a la opresión y la injusticia:
“Es así que para honrar su legado en la actualidad, es imprescindible trabajar de manera conjunta para construir un México más justo, democrático y equitativo, donde los derechos de todas las personas sean respetados y garantizados (…) Nuestra agenda legislativa refleja este compromiso, orientada a fortalecer un marco jurídico que proteja los derechos y garantías de todos los sectores de la población. Nos dedicamos al bienestar y progreso de nuestra entidad”.
La diputada recordó además que las y los legisladores están dispuestos a trabajar estrechamente con el poder ejecutivo y judicial para satisfacer las necesidades de la ciudadanía.
Finalmente, Luz Elena Morales señaló que la firma del Plan de Guadalupe no sólo marcó el inicio de una lucha armada, sino que también sentó las bases para una transformación profunda y duradera de la nación:
“Como coahuilenses siempre nos sentiremos muy orgullosos de la contribución de nuestra tierra en la historia de México. ¡Que viva el Plan de Guadalupe y que vivan los primeros 200 años de la grandeza de Coahuila!”.
Mientras, allá a lo lejos, en Palacio Nacional, López Obrador se mantiene sin hacer presencia para compartir con los habitantes de esta tierra uno de los aspectos que transformaron la historia del país.
Ni falta que hizo, dirían algunos de los asistentes al Plan de Guadalupe, y es verdad, si el mandatario mexicano no ha sido capaz de trabajar por el bienestar de las familias coahuilenses a quienes además les ha arrebatado recursos millonarios que nunca fueron devueltos, mucho menos se va a ocupar en estar presente en todo aquello que representa enorme orgullo para quienes nacieron bajo este cielo.
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