Recientemente el estudio Índice de Desempeño de los Programas Públicos Federales 2021 (INDEP), que realiza la Agencia para el Desarrollo (GESOC), ventiló que los programas sociales del gobierno federal que encabeza Andrés Manuel López Obrador, han fracasado y han operado en escenarios de opacidad durante dos años consecutivos. La investigación vislumbró que el 84 por ciento de los programas sociales de este gobierno, son ineficientes.
De los 96 programas que ofrece la administración federal, 81 presentaron un ejercicio de bajo desempeño en el apoyo y crecimiento económico de los beneficiarios. Pero aún con los pésimos resultados, el morenato volvió a proponer en el Proyecto de Egresos de la Federación (PEF) 2022, que 61 de los programas sigan funcionando, otorgándoles unos 677 mil millones de pesos, derrochando los impuestos que pagamos todos los mexicanos.
Faltan dos meses para que culmine el año. Sin embargo, no veo que México haya avanzado en la resolución de grandes problemas nacionales como son la pobreza, la desigualdad y la creación de empleos bien remunerados. Al contrario, vemos que acelera el desempleo, y la pobreza extrema creció a 10.9 millones de personas en lo que va del sexenio morenista. Por lo que puedo concluir que los programas sociales del presidente no han logrado que la economía se recupere como tanto prometió.
Con los pésimos resultados de la aplicación de los programas sociales morenistas, la realidad nos demuestra que México requiere una política pública progresiva para que el PEF se destine de mejor manera para aliviar los problemas de la población más vulnerable. Analizar los fenómenos sociales desde su raíz, de cómo se origina y como se deben solucionar, por ejemplo las formas de opresión, discriminación y desigualdad, que estructuralmente potencian el debilitamiento de los sectores más pobres. Esto se llama interseccionalidad, algo que desconocen los asesores del presidente.
La sociedad mexicana es de las más desiguales en el mundo y los instrumentos como los programas sociales deberían coadyuvar en subsanar las injusticias sociales. Nos cuestan más de 300 mil millones de pesos al año. Por eso, existen muchos cuestionamientos de la confiabilidad de los padrones de beneficiarios, además, las auditorias públicas han arrojado diversas irregularidades e indicios de corrupción, en plena “cuarta transformación”.
Denunciemos a este gobierno mentiroso y que en campaña solo prometió el oro y el moro para embaucar al pueblo mexicano. Solo unidos en Antorcha lograremos que más mexicanos abran los ojos, que conozcamos que los programas sociales de López Obrador no han solucionado los problemas de la gente, porque solamente son un paliativo temporal, porque todos vemos a diario que la canasta básica, el gas, y la gasolina siguen incrementando sus precios.
Para acabar con la pobreza se tiene que modificar el actual modelo económico injusto que impera. Antorcha propone un modelo económico con cuatro ejes: una política fiscal progresiva y justa, que se generen empleos, que sean bien remunerados, y que el gasto social se oriente eficazmente en desarrollar a nuestra patria de manera inclusiva. Estamos a tiempo de corregir el rumbo, viene 2024.
0 Comentarios:
Dejar un Comentario