MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

Eclipse solar opacó el debate presidencial

image

En menos de 24 horas, entre la noche del domingo siete y el mediodía del lunes ocho de abril, dos sucesos atrajeron la atención de los mexicanos; pero el que mayor impacto tuvo fue el eclipse solar, que superó con mucho al interés generado por el primer debate presidencial, cuyos protagonistas –dos candidatas y un candidato–, se dedicaron a intercambiar acusaciones y no ofrecieron propuestas de fondo a los problemas del nacionales.

El tema central del encuentro fue “La sociedad que queremos”, dividido en tres bloques: educación y salud; transparencia y lucha contra la corrupción y grupos vulnerables y violencia contra las mujeres. Su organización costó al menos 10 millones de pesos (mdp), monto que no garantizó un buen servicio de relojería. La candidata morenista Claudia Sheinbaum siguió su guión e intentó no caer en las “provocaciones” de su principal contrincante, por lo que todo quedó en ataques y cuestionamientos.

ninguno de los tres candidatos presidenciales tiene la altura política e intelectual suficiente para conducir al país por el camino de desarrollo integral que urge a la población

Xóchitl Gálvez se vio nerviosa, incómoda y dispersa; llamó a la “corcholata” del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) la “dama de hielo” por su frialdad ante las víctimas de la tragedia del centro escolar Rébsamen y las del accidente de la Línea 12 del Metro. Sheinbaum no se mordió la lengua en su revire y calificó de “mentirosa y corrupta” a la abanderada del “PRIAN”. El más “gracioso y divertido” fue Jorge Álvarez Máynez, el candidato de Movimiento Ciudadano (MC).

Con relación a los análisis de los graves problemas existentes en los rubros de salud, educación, transparencia y combate a la corrupción y la violencia contra las mujeres, ninguna de las propuestas planteó soluciones de fondo y ninguno de los tres postulantes “puso el dedo en la llaga”: que el principal responsable del desastre económico, social y político que hoy padece México, AMLO, ya está con la mochila en el hombro para irse a La Chingada… su ranchito de Palenque, Chiapas.

Al término del primer debate, Álvarez Máynez agradeció que MC aparecerá en la boleta porque, aunque sabe que no tiene la mínima oportunidad de triunfar en los comicios del dos de junio, al menos pudo exhibirse como el más gracioso de los tres bufones. Xóchitl Gálvez mostró una bandera de México con la que colocó el escudo al revés, según ella, para aclarar que va a “enderezar la República”; pero en los corrillos políticos se cuenta que no podrá estacionar su bicicleta en Palacio Nacional.

Y la recién bautizada dama de hielo aseguró que “el pueblo de México quiere que sigamos avanzando con la Cuarta Transformación”; ¿avances? No. Esos “avances” únicamente están en su mente; porque en el país no se ven por ningún lado y únicamente se observa estancamiento y retroceso en todos los ámbitos de la vida nacional. Los avances de Claudia son las mentiras que su mentor y dueño del circo plantó en su cerebro.

El primer debate, así como el de los aspirantes al Gobierno de la Ciudad de México, mostró que ninguno de los tres candidatos presidenciales tiene la altura política e intelectual suficiente para conducir al país por el camino de desarrollo integral que urge a la población. La candidata oficialista, alineada al mandatario saliente, no representa ningún riesgo para los intereses de la clase social que mantiene el poder económico y político de México.

En el debate no vimos candidatas libres, discursos nuevos, propuestas o programas atractivos. Lo más estridente fue la defensa de políticas pasadas: Gálvez defendiendo a los gobiernos panistas y priistas y Sheinbaum elogiando a Morena y a su ventrílocuo del Palacio Virreinal, quien en poco más de medio año tendrá que retirarse a chachalaquear al sureste.

Los debates, como las encuestas, no mueven una elección, salvo que se presente una denuncia o haya un evento político o económico que impacte profundamente a la opinión pública. Por ello, el primero de los tres encuentros no logró definir o cambiar el rumbo del voto ciudadano. Esperemos a ver lo que pasará en los otros dos debates. Por lo pronto fue claro que el fenómeno solar “eclipsó” al primer encuentro, ya que éste únicamente fue visto por 11 millones de personas, mientras el ocultamiento del Sol por la interferencia de la Luna atrajo la mirada de entre 50 y 60 millones. Por el momento, querido lector, es todo.

0 Comentarios:

Dejar un Comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados *

TRABAJOS ESPECIALES

Ver más