Culminaron los trabajos de la XLII Legislatura Local y al mismo tiempo de Osvaldo ávila, dirigente antorchista e integrante de esta, quien cumplió y amplió expectativas en la materia, así como en la gestión que desempeñó durante el tiempo que duró en el cargo.
A su paso por el Congreso del estado presentó trece iniciativas de ley y puntos de acuerdo, dentro de los cuales destaca la Ley de Condóminos, así también la Ley para la Regularización de Predios Urbanos y Rurales, además de la Ley de Presupuestos Participativos, etc. Con estas se podrá dotar de un marco legal para regular la convivencia vecinal en la zona urbana; se logrará la certeza jurídica de predios en la ciudad y campo; y se pretende dotar de voz y voto, esto es, que la ciudadanía pueda decidir en qué obras prioritarias se aplicarán los recursos del erario en sus respectivas localidades.
Otro de los temas enarbolados fue sobre los defraudados de Rincón Guadalupano. Desde la tribuna se logró el exhortó a autoridades del Fondo Nacional para la Vivienda del Trabajador (Infonavit), mismo que se ha logrado avanzar y se espera que en semanas próximas se logre resolver el problema en favor del total de familias, quienes reuieren atención urgente y seguimiento puntual para resolver una problemática real que si bien ya favorece a algunos colonos, el resto sigue en espera y de este punto ya han pasado al menos 16 años.
Por otra parte, con la lucha a nivel federal acercó en los últimos dos años más de 70 millones de pesos que han sido aplicados en la pavimentación de más de numerosas calles de colonias y comunidades, en la rehabilitación de carreteras, en la edificación de espacios deportivos; en el tema de vivienda se suman centenares de losas y finalmente el logro de domos en escuelas de todos los niveles en Guadalupe y Vetagrande. Y aún hay más que enlistar.
Hoy, el dirigente agradece la confianza que la ciudadanía del IV distrito depositó en su persona para ser su representante en el poder legislativo y ahora se dedicará de tiempo completo a sus labores como líder estatal del Movimiento Antorchista de Zacatecas, esforzándose en el desarrollo numérico de la organización social.
Pero para no quedarnos en la historia y hablar sólo de glorias pasadas, creo que Antorcha y su líder aún tienen mucho que demostrar y estas metas tienen que ver con lograr cohesionar a la gente humilde y dispuesta a luchar por acabar con la pobreza que aflige a la mayoría de mexicanos, este fenómeno social que no se acabará con el nuevo gobierno; esta alternancia y propósito ya se vivió en México durante el sexenio de Vicente Fox, y de lo que ya conocemos sus resultados.
Las nuevas tareas demandan educar a la población y con esto no me refiero a certificar a los adultos en su educación secundaria, por ejemplo, eso ya lo hacen nobles instituciones del estado mexicano, se trata de politizar y convencer a la ciudadanía de que debe luchar para reivindicar derechos fundamentales como el derecho a tener una vivienda digna, al trabajo y un salario remunerador, a la salud, a la educación y desde luego al derecho de asociación y reunión pacíficas.
En días presentes, Antorcha sigue nucleando, explicando y acercando acciones de beneficio social que impactan directamente en la mejora del entorno y el núcleo de miles de familias, porque la labor no se ha terminado. El cambio no es automático, ni vendrá sólo por el impulso del triunfo en las urnas de otro partido, pues la falta de empleos, los bajos salarios, la inseguridad, en fin, la pobreza de la mayoría de los mexicanos sólo puede cambiarse si se implanta otro modo de producción en México.
El momento llegará, por ahora, puedo afirmar que en Zacatecas Antorcha y su dirigente cumplieron con la tarea y no sólo eso, sino que además se ampliaron las expectativas tanto de la población en general como de la clase política y que esta dinámica debe ser emulada por los nuevos representantes sociales. Ahí la tarea.
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